Ruta circular transfronteriza entre Sara y Zugarramurdi

Tiempo: 2 h 45 min.
Dificultad: Fácil.

Itinerario:
Desde la entrada de las cuevas de Sara, justo antes del aparcamiento, hay que tomar la carretera de la derecha que sube y traspasa el acceso a unas canteras. Un sendero de losas paralelo a la carretera, conocido como "la senda de las brujas" y balizado con un caballo azul lleva hasta la venta de Errotaxarre para internarse en el bosque. Este camino, de suaves pendientes, deja atrás una primera y pequeña cueva, frecuentada por grandes grupos que comen en el interior de la oquedad (en realidad, es el anexo de un restaurante cercano). El sendero sale del bosque por un momento y se cruza con un caserio y la pista del sendero de Pequeño Recorrido PR-91, para inmediatamente envolverse de nuevo entre hayedos y aparecer en la cueva de Axko. La calzada prosigue, iluminada mágicamente por los rayos del sol que se van filtrando entre las arboledas, para ir a caer sobre el torrente del Infierno y los prados de Akelarrea. Tras cruzar el puente y ascender las escaleras se llega a Zugarramurdi, a la entrada de las cuevas de la localidad. Continuando por la calle de las cuevas hacia la plaza del pueblo se llega a la iglesia, a cuya derecha sale una pista, con un pequeño repecho, en dirección a Etxalar. Al poco, ya en las afueras, el camino se desdobla, optando por el sendero de Pequeño Recorrido PR-90, a la izquierda, como forma más directa de coronar el Atxuria a través del collado de Ibaineta.
Para llegar a la cumbre de esta montaña la ruta recorre sucesivamente una primera sección de cuestas entre bosques y manantiales por un ancho camino y un posterior campo cubierto por helechos seccionados por el corte del sendero que desemboca en una pista. La cual, mediante una desnivelada vía de ascenso hacia Gaineko Borda, coloca al senderista en una posición dominante con respecto al valle del que se procede, ofreciendo una primera entrega de inmejorables vistas. Posteriormente al paso de la borda, el camino suaviza el perfil y penetra en un pinar, al cabo del cual se aparece en el collado de Ibaineta (506 m). Cruce de caminos y antiguo lugar de ritos funerarios, en este enclave se distingue perfectamente la división norte-sur de las vertientes pirenaicas y un surtido de senderos. Hay cuatro variantes posibles en función del destino final. Para encaminarse al Atxuria habrá que salir por el primero a la derecha, superando un sendero que culebrea entre rocas hasta situarse en el inicio del humilde cresterío. Guiándose por las flechas blancas con un "sí" en amarillo se progresa velozmente hacia la cima, reconocible por ser el terreno más rocoso y topar con un vértice geodésico derribado y un buzón que confirma ser Atxuria o Peña Plata (759 m). Después de devolver la propiedad de las peñas a la escuadrilla de buitres que allí han encontrado su particular pista de despegue, iniciamos el retorno a las cuevas de Sara por el extremo opuesto al de ascenso. Al poco de abandonar la cota mayor un sendero se ensancha y empalma con la pista que sube camino de Loretxo borda. Al comenzar a descenderla ya se ven las canteras adjuntas a las cuevas y, a ratos, el aparcamiento. Desde aquí se observa una buena panorámica de Sara y el pico Larrun (900 m). Hemos llegado de nuevo a las cuevas de Sara, punto de inicio de esta interesante ruta.

1 comentarios:

Criss dijo...

Lo de 2:45 no se lo cree nadie y lo de dificultad fácil será para expertos porque hemos ido con niños y casi los matamos, el camino de vuelta debería estar mejor explicado. Por lo demás es una ruta realmente hermosa.